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Dos cosas me vienen a la mente cuando pienso en el menudo.
Una es ese punto absolutamente sensacional en el radar de la música pop conocido como Menudo, el grupo de pop latino que en un momento dado se había apoderado de la radio –y de los corazones– de millones de fanáticos a finales de los 70 y principios de los 80, un grupo que por un breve momento contó con un jovencísimo Ricky Martin antes de que se convirtiera en el líder de la vanguardia musical de la “Explosión Latina” de 1999, pero ¿qué más me viene a la mente cuando pienso en el menudo?
Pues el mágico caldo mexicano que de alguna manera logra curar todo lo que te aqueja, ya sea que tengas un resfriado, una gripe o una resaca no tan buena. Es uno de esos elixires especiales que son tan complicados y requieren tanto tiempo que normalmente solo se sirven los fines de semana si sales a buscarlo a un restaurante o tal vez sea solo los fines de semana porque esos son los días de mayor resaca.
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Detrás de la creación de este sabroso plato
El origen del menudo es, en el mejor de los casos, un poco misterioso. Nunca fue una receta específica ni vino de un lugar específico. Conocida como una sopa del pobre, se dice que el menudo se inventó durante la era previa a la revolución en México como una forma de garantizar que ninguna parte del animal se desperdiciara, porque era un lujo tirar cualquier alimento en aquellos días (como debería ser hoy). También es un misterio cómo la sopa de este hombre pobre se convirtió en un manjar de vecindario conocido por curar las cabezas y las resacas de las masas.
La receta del menudo
Esta complicada receta requiere algunos ingredientes, incluidos pancita, pata de res y huesos, que desempeñan un papel en el sabor intensamente único. Ten en cuenta que la preparación combinada con el tiempo de cocción significa que lleva horas y horas prepararla.
Para ser justos, mi familia rara vez hacía menudo. En ese caso, normalmente, solo te daría mi receta y te diría que la disfrutes. Como no puedo, pasé un poco de tiempo investigando hasta que encontré una receta que me resultó sumamente familiar en sus ingredientes y su preparación. El enlace está incluido aquí.
Si bien es posible que nunca sepamos el verdadero origen del menudo, una cosa es segura: ha salvado muchas vidas los domingos por la mañana.
Por Liv Styler
Olivia Monahan es una periodista, editora, educadora y organizadora chicana en Sacramento cuyo único objetivo es arrojar luz sobre historias de nuestras comunidades más impactadas y marginadas, pero, aún más importante, que esas historias humanicen a quienes normalmente quedan excluidos. Es finalista de la Beca Ida B Wells de periodismo de investigación 2022, miembro de Parenting Journalists Society y ha publicado en The Courier, The Sacramento Bee, The Americano y Submerge Magazine, entre otros.
